Ceneca Valdez interpuso una demanda por acoso sexual por parte de varios presos que cumplen su condena en el condado de Miami-Dade.
La demanda está dirgida particularmente al condado de Miami-Dade, por haber ignorado y menospreciado las quejas que desde hace tiempo puso para exigir que se mantenga un ambiente laboral seguro para ella y otras compañeras de trabajo.
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Según su testimonio, regularmente encuentra a hombres masturbándose mientras hace el recorrido por los pasillos, lo cual ha afectado su desempeño laboral, además de “distraerla, avergonzarla, asustarla y humillarla”.
El gobierno local y las autoridades de la prisión Turner Guilford Knight, desatendieron cada una de las quejas previas de la trabajadora y estimaron que el acoso sexual y la masturbación repentina conocida como gunning, son “una parte inherente del trabajo”.
En busca de soluciones alternativas, la asesora de presos incluso solicitó permiso de utilizar el camino interno que usa el personal médico para evitar pasar por las celdas, pero le fue negado.
Tampoco se le facilitó un acompañante ni un radio o un “botón de pánico” que le permitiera estar más tranquila durante sus jornadas “en caso de que surgiera un evento relacionado con los reclusos varones” mientras caminaba por los “estrechos” caminos entre las celdas.
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Las autoridades carcelarias de Miami-Dade no adoptaron “medidas correctivas razonables para proteger a sus empleadas, incluida la demandante, del ambiente sexualmente hostil que los reclusos crearon”, explica la demanda.
(Con información de SDP Noticias)
